Lanzamiento de productos

Autos autónomos crecen en popularidad

Intel abrió un garaje de autos autónomos

Silicon Valley es el epicentro de la innovación alrededor del planeta. Los autos autónomos crecen en popularidad en Estados Unidos, a pesar de la desconfianza de algunos usuarios hacia los vehículos que pueden conducirse por sí mismos.

Intel abrió un garaje de autos autónomos en su sede de Silicon Valley, lo que demuestra el crecimiento de este mercado entre los amantes de las nuevas tecnologías.

Empresas tradicionales de la industria automotriz, como Ford, han comprendido que el futuro del sector pasa por los autos autónomos, y por ello han comenzado a producir varios modelos experimentales a fin de satisfacer la futura demanda de este producto. A juicio de la experta Katherine Winter, se trata de una revolución similar a la que causó la aparición del vehículo a gasolina en el siglo XX.

Marcas experimentales como Delphi, Mobileye y GO apuestan por entrar en este competido segmento con sus propuestas. El líder en tal sentido es Google, el gigante buscador de Internet que lleva años experimentando con estas nuevas tecnologías.

Accidentes diversos se han registrado con el uso de autos autónomos, aunque en menor escala si se compara con el número de accidentes de vehículos tradicionales. Un conductor de Tesla murió en un choque tras activar el modo de conducción autónomo.

Diversas empresas apuestan por esta misma tecnología

Apple también apuesta por los vehículos autónomos, así como lo hacen otras empresas del ramo de la tecnología. La firma fundada por Steve Jobs le plantea una rivalidad a Google, ya que el buscador más importante de Internet ya ha dado varios pasos en relación con el desarrollo de vehículos autónomos. En la misma dirección está mirando Tesla.

América Economía informa que Apple tiene ya cierto tiempo desarrollando lo que podría ser su primer vehículo autónomo. Los ingenieros al servicio de la empresa de la manzana mordida están desarrollando soluciones en materia de automatización, a fin de que los automóviles del futuro puedan prescindir del conductor.

Expertos de la industria automotriz no dudan en afirmar que la presencia de un conductor humano incrementa de manera notoria las posibilidades de que ocurra un accidente de tránsito. Los vehículos autónomos trabajan con grandes cámaras y posicionamiento satelital para evitar colisiones con cualquier objeto fijo o en movimiento.