Gerencia venezolana

El cambio arranca contigo

Da el ejemplo a los empleados de tu empresa

Cuando se busca alcanzar un cambio organizacional, el fracaso es más frecuente que el éxito.   Se descubrió que la tasa de fracasos empresariales es superior al 60%, mientras que un estudio de Harvard Business Review dijo que más del 70% de los esfuerzos de transformación falla.

El detalle radica en que hay muchos que quieren que la transformación se haga a velocidades poco realistas, con poco esfuerzo de parte de todos, excepto de sí mismo.

Manfred Kets de Vries dice en The Leader on the Couch que “las organizaciones a lo largo del mundo están llenas de personas que son incapaces de reconocer los patrones de comportamiento repetitivo que se han vuelto disfuncionales”. Esto trae como consecuencia una falta de autoconciencia en el liderazgo, y los costos son muy altos.

Cuando la toma de decisiones, la coordinación y el manejo de conflictos, se hace con un bajo nivel de autoconciencia son menos efectivos que aquellos altamente reflexivos.

Para que los ejecutivos logren el éxito, deben comenzar con su cambio a nivel personal. Comience viendo todo lo que provoque algún comportamiento perjudicial para el equipo de trabajo.

Por ejemplo, al querer asumir el mando de un departamento, en pro de un cambio de rumbo, varios clientes se percataron de la impaciencia del empleado y eso empeoraba su propio desempeño y debilitaba la confianza en sí mismo.

Su impaciencia era muestra que padecía problemas más profundos. Cuando las personas hacían preguntas para aclarar dudas, eran interpretadas como algo reacio hacia su visión de trabajo o como una duda pasivo-agresiva dejando en entredicho sus habilidades. No era nada intencionado, pero sus respuestas agresivas crearon la resistencia y agresión pasiva que ella temía. Al final, ni el cliente ni el empleado quedaron satisfechos con las gestiones realizadas.

Gerentes, tienen tarea.