Laboratorios Válquer mejora su tratamiento Shock Anticaída ADN Molecular
La cosmética capilar está en constante evolución en cuanto a Investigación y Desarrollo (I+D) de tratamientos cada vez más eficaces y seguros contra la caída del cabello. El activo que hasta ahora ha ofrecido los mejores resultados es el Minoxidil, pero tiene un uso restringido al campo de la medicina y la farmacia. Además, aunque su eficacia está probada, el Minoxidil presenta ciertos efectos secundarios.
«La investigación en cosmética tiene marcada una meta: conseguir sintetizar una nueva molécula que consiga la misma eficacia que el Minoxidil y no presente contraindicaciones ni efectos secundarios», según explica José Luis Cerrillo, director de Laboratorios Válquer.
En este contexto, el departamento técnico e I+D de Laboratorios Válquer ha conseguido aportar un gran avance a la cosmética capilar, para lograr frenar la caída del cabello. En concreto, se combina un tripéptido con un derivado de ADN molecular, al que se ha denominado Stimucap, y potenciando su resultado con tres vitaminas del grupo B (niacinamida, vitamina B-6 y pantotenato cálcico).
‘Shock Anticaída ADN Molecular’ regula los procesos fisiológicos del cabello y estimula el metabolismo de la raíz capilar, deteniendo la caída y fortaleciendo progresivamente el pelo.
El director de Laboratorios Válquer explica que, gracias a estas investigaciones, han desarrollado un tratamiento Shock Anticaída. «Este tratamiento consigue regular eficazmente los procesos fisiológicos, estimulando el metabolismo de la raíz capilar, deteniendo la caída y fortaleciendo progresivamente el cabello».
Su aplicación es muy sencilla, explica el director del Laboratorio. Con el cabello limpio, solo bastaría aplicar el producto en el cuero cabelludo, masajeando suavemente con las yemas de los dedos, y sin aclararlo después de la aplicación. «En principio se debía realizar un tratamiento más intensivo, utilizándolo diariamente durante dos semanas, y posteriormente se efectuaría un mantenimiento para el que bastarían dos aplicaciones a la semana», añade José Luis Cerrillo.
