Plan de recortes de producción está en duda
Venezuela está urgida de nuevos ingresos para compensar la caída de los precios del petróleo en los mercados internacionales, pero sabe al mismo tiempo que debe adherirse a las estrategias planteadas por la OPEP, la Organización de Países Exportadores de Petróleo. El plan de recortes de producción acordado recientemente en Argelia está en duda, lo que genera variaciones del valor hacia la baja.
OPEP exhorta al cumplimiento de cuotas de producción entre los países miembros e invita a aquellos que no son miembros a solidarizarse en aras de elevar los precios del petróleo, que vienen cayendo de manera sostenida desde septiembre del 2014 como consecuencia de una abundante oferta de petróleo a escala internacional.
Diciembre es el mes acordado por los países miembros y no miembros de la OPEP para comenzar a cumplir los recortes en las cuotas de producción acordados en Argelia. Se espera que el cartel petrolero se reúna a finales del mes de noviembre para ratificar o modificar lo convenido.
Representantes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo confían en que los acuerdos alcanzados el pasado mes de septiembre en Argelia no se queden en el papel, pues es necesaria y urgente la recuperación de los precios del petróleo en los mercados internacionales a toda costa.
Analistas del sector opinan que la OPEP ya no tiene el poder de influencia como antes sobre el mercado petrolero mundial, pues las pautas las está dictando Estados Unidos al haberse convertido en el principal productor de crudo a escala planetaria con el llamado petróleo de enquisto. En Norteamérica, sin embargo, creen por ejemplo que el futuro de la industria automotriz pasa por los autos eléctricos y no aquellos movidos por gasolina o diésel.
Arabia Saudita es el país que más genera sospechas sobre un posible incumplimiento de las cuotas de producción planteadas por la OPEP en Argelia. Los saudíes temen perder cuotas de mercado pero están padeciendo por igual la baja en los precios del petróleo, lo que ha motivado numerosos recortes y reajustes en el presupuesto nacional.
